El 3 de abril de 1516, Guillermo IV, Duque de Baviera, anunció la “ley de pureza” y prohibió el trigo en cualquier uso que no fuera la elaboración del pan. Unos siglos más tarde, levantada la prohibición, nuestros maestros cerveceros vuelven a elaborar las famosas Weißbier, cervezas artesanales de trigo, como antaño. Ligeramente dulces, con maltas sutilmente tostadas, sin filtrar y con poco lúpulo; la combinación perfecta para disfrutar de todo el sabor de un cereal con carácter. La larga espera ha valido la pena.