Entre colinas de viñedos y pinos, al oeste de la sierra litoral, el viejo roble escribe el paso del tiempo en su corteza. Bajo su sombra, la uva tempranillo madura lentamente hasta alcanzar las condiciones óptimas para elaborar nuestro Gran Roble, un vino sabio y honesto que, tras una larga crianza en barrica, acumula todo el saber y sabor de un paraje único y singular.