La abeja de la miel
En mayo y en junio, uno de los insectos más importantes para garantizar el buen desarrollo de la vid es la abeja de la miel (Apis mellifera). Su nombre proviene del latín apis "abeja" y melíferas "melíferas", literalmente "la que lleva o tiene miel". Su nombre no es casualidad, ya que en el tercer y último par de patas la abeja de la miel tiene un cesto donde coloca bolitas de polen que recolecta cuando visita las flores.
¿Y por qué es importante que nos visite? Pues porque las abejas son los polinizadores más importantes del reino animal. Su aparición en viña en la época de floración garantiza la fecundación de la flor y puede hacer aumentar la producción de la cosecha de forma considerable, hasta un 30%.
Existen tres tipos diferentes de polinización:
- Anemofilia: se lleva a cabo con la ayuda del viento, transportando y distribuyendo el polen. Por ejemplo, el diente de león.
- Hidrófilo: propia de algunas plantas acuáticas.
- Zoofilia: llevada a cabo por animales. La más frecuente es la entomófila, en la que participan insectos de los órdenes Hymenoptera, Lepidoptera, Coleoptera y Diptera. En el orden de los himenópteros encontramos las abejas, abejorros, avispas y hormigas. Las abejas y los abejorros efectúan el 80% de la polinización entomófila.
Las especies vegetales que proporcionan una fuente de alimento a las abejas reciben el nombre de especies apícolas. En el mediterráneo podemos encontrar muchísimas: tomillo, romero, caléndula, salvia, borraja, cardo o vid, entre muchas otras. La Vitis vinifera, a pesar de ser una especie con interés apícola, no tiene una flor muy melífera; sin embargo, las abejas pueden aprovechar el jugo de las bayas rotas o que se han estropeado en época de vendimia ya que, debido a la configuración de sus mandíbulas, las abejas se ven impotentes para agujerear los frutos.
El polen que proporcionan estas especies apícolas es la fuente principal de proteínas para las abejas, convirtiéndose en un alimento indispensable para su supervivencia. Las abejas también generan propóleos, una sustancia viscosa con propiedades antisépticas que se elabora a partir de la recolección de las resinas de algunos árboles y de su propia saliva. Es la materia con la que revisten la colmena.
Gracias a su labor indispensable, muchas bodegas han comenzado a instalar colmena de abejas junto a las viñas. Y ya no es únicamente por la miel que producen. La abeja es importante porque es fuente de vida y biodiversidad.